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El Chico Dhall © novel Chapter 54

Extra-2

Pov Jex

Después de la tragedia llega otra tragedia, pero la única diferencia de esta es que no es mala.

¿Qué harán esas novias cuando sus novios se juntan con sus amigos y pasan horas y horas jugando a la play?

A mí sinceramente me alegra que Elián se lo pase bien, ya que ha tenido tanto trabajo que no ha tenido tiempo para él, pero jamás creí que se volvería el mejor amigo del pelirrojo de Zuani.

¿Len?

¿Así se llamaba?

—¿Caemos en parque? —cuestiona por el micro de los cascos y presto suma atención al autobús trazando una línea recta pasando por todos estos lugares en el mapa.

—¡No hables por los dos lados que te escucho doble! —giro hacia el pasillo que da a la puerta abierta del cuarto de juego de ellos y veo como Yannick junta sus cejas molesto mientras tiene los ojos puestos en el ordenador.

Sonrío. Es normal, le ha dicho que no haga eso cientos de veces y Elián sigue molestándolo.

—Vamos a Albercas, hay más cofres —escucho la voz del pelirrojo gracias a mis oídos sensibles.

—¿Neythan? ¿Estás ahí? Brother, está bien ser tímido, pero si con esto no te sueltas no quiero ni imaginar cuando te encuentres rodeado de cámaras con nuestra hermana —se queja Elián y sale disparado del autobús hacia el punto que marco.

—¡NO MOLESTES A MI BEBÉ! —escucho a Kayla del otro lado y sonrío negando.

—Dejen jugar a los expertos y cállense que estoy viendo como mi pelirrojo juega para aprender —sale Zuani a la defensa y Elián voltea a verme esperando que diga algo.

—Jex, me maltratan verbalmente y no dices nada —se gira al juego y mis ojos van al chico de ojos verdes quien me quita la mirada rápidamente al pillarlo viéndome.

No soy tan mala, sé por lo que está pasando ese pequeño idiota y solo es tirarle sal a su herida.

No estoy del lado de él por hacer sufrir a Quero, pero debe ser duro que te rechacen y más si esa persona es tu mate.

Regreso a mi chico Dhall y me comunico con él por medio de nuestra conexión.

Si no dije nada es por tu hermano, se ve que la está pasando mal.

Elián quita la mirada un segundo del juego solo para asomarse y ver al castaño, regresa rápido construyendo una torre para ir protegiéndose de las balas que le están llegando de todas direcciones.

Yannick se lo buscó, él tentó a la suerte y está demostrado que eso nunca es bueno, aunque por lo que me contó hace días atrás, tu mejor amiga ya no está tan recelosa con él. Me dijo que al menos lo tolera a cierta distancia y que es un avance por muy pequeño que sea.]

Es normal que Quero le dé cierta prudencia porque ella siempre lo amo, Yannick era su crush, su amor imposible, pero lo arruinó y a ella se le rompió todo por dentro.

Es raro pensar que haya sido infiel, cualquiera diría que lo sería primero yo, pero ni por el pensamiento se me ocurrió traicionarte.]

Así me gusta, tranquilito, derechito y obediente.

Sí amor, sí.]

No puedo evitar reír ante su comentario y me bajo del sillón solo para estar sentada a su lado y molestarlo. Le muevo las cejas de arriba a bajo y muerdo mis labios sonrientes.

No empieces, Jex.]

Yo no estoy haciendo nada.

Su personaje recibe un disparo por la espalda y queda de rodillas en suelo, rápido baja el micro y toda su atención se posa en el juego —Cuidado con un franco detrás.

—Muerto. Espera, voy a levantarte, cúbranme —el personaje de Len se acerca al de Elián y lo ayuda a levantarse para seguir jugando en equipo —¿tienes minis? —cuestiona y Elián le suelta un frasco chico de color azul.

—Aquí afuera, te lo he marcado —dice y con esto sigue jugando.

Alzo mis cejas impresionada y me tiro hacia atrás cayendo en la alfombra de suave pelusa, cierro mis ojos y recuerdo aquella vez tan graciosa donde ambos se negaban a ayudarse y pedirle algo al otro, y ahora hasta se ayudan en un juego.

Flashback

Aprieto la mano de Elián al ver llegar las prados de los Dhall, observo con incertidumbre a los demás y trató de controlar mi agitado corazón.

El señor Amir sale de la primera y el señor Wade sale de la última, ambos con dirección a la del centro, sin embargo de esta sale el mismo chico pelirrojo que atacó a mi Elián fuera de los límites de la manada. En sus brazos carga a nuestra niña de ojos grises y sin decir nada pasa por nuestro lado con ambos Alphas guiandolo por la mansión.

—¿Qué le pasa a Zuani? ¿Por qué no viene despierta? —su madre se pega a mis brazos y la tranquilizo abrazándola.

—Tal vez su cuerpo haya tenido mucho, pero si de algo le sirve diré que escuche su corazón latir.

—Yo si voy a poner a latir a alguien justo ahora —mi pelinegro entra hecho una furia y ambas vemos a Yannick instantáneamente.

Alza sus manos —Entendí la referencia y sin que dijesen una sola palabra —entra detrás de Elián y llega Kayla por detrás de mí dejando caer su peso en mi espalda.

—Uiss, Alpha contra demonio-brujo. No quiero ni pensar en lo que les hará el señor Amir si llegar a pelearse en frente de él.

—Kayla —la riñe la señora Sara y nuestra rubia se pega a ella como una niña.

—Mami.

—Ni madre, ni mami, ni mamá, solo lo soy cuando te conviene ¿dónde estabas? —cuestiona la señora de ojos azules y Kayla se separa posandose detrás de su verdadera madre.

—Madre, ataca —dice y contengo las ganas de reír ante la graciosa situación. Mi suegra achica sus ojos y sin previo aviso le mete un fuerte manotazo en el brazo haciendo que la rubia se sobe el lugar adolorido.

—Eso dolió.

—Mejor agradece que no le digo nada a tu papá, porque tengo piedad de ti.

—¿Otro más haciendo escándalo? —el señor Amir trae a ambos chicos agarrados del brazo con Yannick detrás de él. Sus ojos rojos tienen cierta diversión en ellos y esa sonrisa macabra que sale de sus labios eriza mi piel.

Esta es otra cosa que siempre diré.

El Señor Amir da muchísimo miedo cuando está enojado.

Deja al pelirrojo y pelinegro fuera de la mansión cara a cara, todos nos giramos para ver el espectáculo y a nuestro lado se posa el señor Wade con una sonrisa —Les dije que no lo hicieran.

—¿Qué pasó? —cuestiona Sara.

—Volvieron el cuarto donde estaba Zuani un caos por enfrentarse y a —señala a Amir —tu hijo no le gustó y perdió la paciencia.

—Yo no tengo nada que ver. Estaba tan tranquilo con Zuani en su cuarto y de la nada llegó él a amenazarme.

—Ahora te sientes con derecho a reclamar cuando mira como dejas a nuestra hormiga.

—Discúlpame, pero tu hormiga es mía —contraataca el pelirrojo y por sus ojos pasa un destello rojo.

Elián sonríe con ironía —Tan tuya que hasta moriste sin saber que ella también lo haría... Muy bien la protegiste, idiota —los ojos azules de él cambian a verdes.

—Lo hice para que no muriese ella, porque sabía que con ella viva encontrarían la forma de salvarla y salvarme, en cambio, conmigo vivo lo que habrían hecho hubiese sido matarme, tonto, dale un poco más al coco —el chico hace notar su enojo mostrando sus ojos rojos.

Aquí hay pelea pura y dura. Apuesto diez mil a mi pelinegro, mi macho, mi Alpha. ¡El otro que se joda!*

Fally, no es momento para tomarse esto con gracia.

Por nuestro lado pasa la chica que antes venía dormida y hace a un lado a su padre, le da una rápida mirada al pelirrojo y este retrocede dos pasos de Elián controlando su ira. Ella gira hacia nosotros y sus ojos grises dan conmigo —Jexi —me llama y como una orden me coloco a su lado, la pelinegra ve aun a Elián con los ojos verdes y entiendo lo que me quiere decir.

—Elián —lo llamo y ladeo mi cabeza un poco levantando mis cejas, él inmediatamente observa hacia otro lugar y se cruza de brazos volviendo a la normalidad.

—Ambos deben aprender a llevarse bien, porque ahora somos familia y si un día uno necesita algo del otro este se lo tendrá que proporcionar —habla Zuani.

—No necesitaré nada de este...

—Len —lo corta ella —cállate, por favor y acepta las condiciones que tenemos para darte.

—Y si alguno necesita la ayuda del otro también se tendrán que ayudar, esa es otra condición —digo yo y Elián rueda sus ojos.

—Nunca necesitaré ayuda de...

—Elián —junto mis cejas molesta y él solo se limita a suspirar cansado.

Ambas nos miramos entre sí y caminamos en sincronía hasta nuestra persona predestinada, la jalamos hasta estar a escasos centímetros y levantó la mano izquierda de mi pelinegro, Zuani hace lo mismo con Len y ellos solo se limitan a batallar en una lucha de miradas sin parpadear.

—Mucho gusto, soy Len Ivanov.

—Igualmente, Elián Dhall.

Algo me dice que abra mucha tensión este año.

Fin flashback

Tensión es lo que menos hay.

Todos creíamos que el pelirrojo se haría mejor amigo más rápido del chico con ojos verdes, pero por alguna razón terminó siendo amigo de su enemigo.

En fin, esas son las vueltas que da la vida.

Elián y Len, Len y Elián.

Y es por eso que nunca hay que decir nunca, ni tampoco escupir para arriba porque te cae la saliva, y yo soy un vivo ejemplo de eso.

Si señor.

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