El General Todopoderoso de Dragón novel Chapter 169

Capítulo 169 En ese momento, ella ya se había enamorado de James. Había decidido que él sería el único hombre en su vida.

Nunca esperó que él tonteara con otra mujer tan pronto, sin mencionar que la mujer era su prima.

‘Vamos a…’

Quería pedir el divorcio, pero las palabras se le atascaron en la garganta. ‘Cariño, ¿qué estás tratando de decir?’ ‘N-Nada’.

Thea no se atrevió a decir esas palabras.

Ya no estaba motivada para escribir la solicitud para abrir una tienda, así que se subió a la cama y se durmió.

La noche transcurrió en silencio. El día siguiente.

Después de ponerse un atuendo profesional de negocios, Thea partió hacia Eternality Group temprano en la mañana. James no tenía nada planeado, así que durmió hasta las diez de la mañana.

Últimamente habían pasado muchas cosas en Cansington. Warren Xavier, el difunto jefe de los Xavier y uno de los Cuatro Grandes, había muerto. Llegó la caída de los Xavier, y cayeron en desgracia. Las cabezas de los Frasier, los Wilson y los Zimmerman estaban todas muertas.

La sucesión del Blithe King siguió su ejemplo.

A continuación, un magnate misterioso compró el Trade City Center. Justo cuando la gente estaba en una acalorada discusión, los Callahan lanzaron una bomba hoy.

Aunque los Callahan eran una familia de segunda categoría, últimamente habían estado robando el centro de atención.

La primera vez fue cuando Thea llamó a Alex Yates, lo que provocó la quiebra de los Xavier.

La segunda vez fue cuando Lex falsificó una carta de invitación a la ceremonia de sucesión del Rey Alegre.

Además, justo esta mañana, en Eternality Group of the Callahans, Lex Callahan se presentó personalmente en una conferencia de prensa. Declaró que Thea Callahan sería la presidenta ejecutiva oficial del Grupo y que tendría el cincuenta por ciento de las acciones de la familia.

Durante la conferencia de prensa, Lex enfatizó la promoción de la cooperación entre Eternality y Celestial Group y mencionó la relación entre Thea y la Sra. Lawson de Longevity Pharmaceuticals.

Incluso describió la imagen de los hombres poderosos arrodillados ante Thea en el banquete de cumpleaños de Yuna.

Con la celebración de la rueda de prensa, los Callahan han aparecido una vez más ante las masas.

Después de eso, Lex extendió una invitación a todas las personas de todos los ámbitos de la vida para el banquete de su octogésimo cumpleaños, que se llevaría a cabo en el Hotel Cansington en dos días.

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Por un momento, los Callahan fueron la comidilla de la calle.

La gente hablaba de cómo Thea ahora era la líder de los Callahan. Con sus conexiones, el ascenso de los Callahan estaba ahora a la vista.

Thea volvió a ser famosa. James, como esposo de Thea, naturalmente también se convirtió en un tema de discusión.

Lo tildaron de marido incompetente y de hombre inútil.

Al despertar, James se levantó de la cama, arregló el tapete y salió de la habitación.

Habiendo recibido sus acciones ayer, la familia había salido para una celebración. Sólo quedó Xara. Estaba en el sofá revisando su teléfono, buscando ofertas de trabajo en los sitios web de la empresa. Ella había querido trabajar en Eternality. Sin embargo, se sentía incómoda trabajando en la empresa de su familiar. Al ver a James salir de la habitación, colgó su teléfono inmediatamente. “James, ven y ayúdame a encontrar trabajo”. Como Thea no estaba presente, James encendió casualmente un cigarrillo. Se dirigió hacia Xara y se sentó en el sofá. Mirándola, dijo con frialdad: “Ve a una feria de trabajo si estás buscando trabajo. ¿Por qué me pides ayuda? Se sentó al lado de James y lo abrazó del brazo, haciéndose la coqueta. Eres influyente, después de todo. Podría encontrar un trabajo decente si me ayudaras”.

Los dos estaban tan cerca que sus cuerpos parecían aplastarse. El pecho de Xara sobresalía y frotaba deliberadamente sus pechos contra el cuerpo de James.

Incapaz de soportar su coqueteo, James se movió para irse.

En ese momento, la puerta se abrió.

David y Alyssa entraron. Al ver la escena en el sofá, quedaron atónitos.