Login via

Enamorándome de mi esposa provisoria novel Chapter 136

Capítulo 136

Bueno, entonces cuando empezo tu aventura con Christopher? -Samuel preguntó con desden.

Kathleen le miro de recjo.

De verdad quieres saberlo? No tienes miedo de que te disparen?

– Sitengo miedo-respondió Samuel. Su tono era escalofriante.

-Asi que no preguntes. – Kathleen hizo una pausa, dudando. Luego continuo-: Me tomo muy en serio la privacidad de las personas. Por lo tanto, no tengo interés en compartir mi vida privada con personas ajenas.

La palabra de Kathleen resonó en la mente de Samuel. «Extraños?»

Una sombra fue envolviendo sus ojos. «No hace mucho me llamaba familia, ¿pero ahora soy un extraño?»

-Ya está hecho. Ya puedes comer. -Kathleen apagó el fuego de la estufa.

A continuación, traslado el plato de pasta al comedor.

Mientras tanto, Samuel trato de disipar la hostilidad en sus ojos, tratando de recuperar la compostura.

-Gracias.

-Muy bien, disfruta de tu comida. Ahora me voy a casa. -Kathleen se quitó el delantal y se preparo para irse.

Samuel se detuvo un momento y luego preguntó:

– ¿Quieres quedarte a hablar un rato?

Kathleen le miro con serenidad.

-Me voy a la cama. El rostro de una celebridad femenina es de suma importancia. Ninguna inyección de botox puede compararse con los beneficios del sueño reparador.

Samuel la miró a su vez.

Kathleen habia hablado con calma, sin rencor. Se limitaba a constatar un hecho.

Parecia como si tratara a Samuel como un miembro mas de la familia.

-De acuerdo entonces. Buenas noches -dijo Samuel con incredulidad.

Sin embargo no pudta hacer nada al respecto, no tenia otra opcion De lo contrario, le seria imposible acercarse a Kathleen en toda su vida

Cuandu Kathleen se acerco a la puerta, se giro

-Samuel, por favor, revoca Mi estatus VIP de los centros comerciales.

Samuel le dedicó una mirada fría

-Lo único que tienes que hacer es no gastar tu dinero allt. Entonces suspendere las suscripciones.

—Te pagare la proxima vez: -Kathleen descaba hacer borrón y cuenta nueva con él.

Samuel la fulminó con la mirada.

-¿Vas a gastar el dinero de Charles?

–Por supuesto. — Kathleen levantó la cabeza y declaró con orgullo-: Después de todo, es mi hermano

-Y también soy tu familia y tu hermano. Así que, ¿por qué no puedes gastar mi dinero en su lugar? -Samuel ya estaba un poco enfadado- ¿O es que no quieres ser familia conmigo? No me importa de ninguna manera.

-Esta bien, lo entiendo. -Kathleen siempre tuvo dificultades para ganar una discusión contra Samuel.

Luego se dio la vuelta y se fue.

Samuel se quedó mirando su plato, en el que había un huevo al sol. El huevo era redondo y le recordaba la adorable cara de Kathleen.

Tomo el tenedor y le dio un bocado. Al instante, la comisura de sus finos labios se arqueó un poco.

«Nunca podrà escapar de mix,

Kathleen volvió a la residencia de los Johnson.

Nada más entrar en la casa, oyó a Charles toser. Tenia una expresión sombria en su rostro.

-¿Donde has ido? No había tenido noticias tuyas en todo el dia.

– He comido con Gemma y Benjamin -explico Kathleen-. Incluso te compré una corbata!

La comisura de los labios de Charles se crispó.

-¿Solo has comido con ellos? Eso no es excusa para volver tan tarde.

Estaba enfadado en secreto, pensando que Kathleen intentaba engañarle con una corbata.

Kathleen sonrió. Luego confesó:

–Yo también me reuni con Samuel.

Charles casi se cae por las escaleras.

-Y yo que pensaba que era el quien te molestaba.

Mientras tanto, Kathleen se sentia tranquila.

-Charles, relajate. He hablado de todo con Samuel. A partir de hoy, los dos somos solo miembros de la Tamilia. El es algo asi como un hermano para mi y tu tambien. Los dos son hermanos a partir de ahora. Por

favor, llévenlo bien.

Charles se rio de forma sarcástica:

-ija, ja! Nunca sere su hermano, Seria pedirme que me rebajara a su nivel.

Har lo que quieras entonces. No puedo molestarme en preocuparme por todo eso. Al final, si de alguna manera lo enfureces hasta el punto de que ya no quiera ser mi familia, vendrá a molestarme de nuevo. Cuando eso ocurra, no te dejaré ir sin más-dijo Kathleen con despreocupación.

Charles se quedo sin palabras.

Kathleen subió las escaleras con premura.

-¿En verdad prometiste ser su familia?-A Charles le parecia inexplicable toda esa idea.

Kathleen lo miro.

-Asi es. ¿No crees que sea verdad?

-Si es otra persona, entonces si creo que puede ser verdad. Pero si es Samuel, no lo creo en absoluto. – Charles se burló.

«Ese hombre es demasiado astuto. Su propuesta de ser solo la familia de Kathleen es quizás una forma de ganar más tiempo. Apuesto a que es para poder acercarse a ella. ¿Pero por qué es tan tonta? Ella de verdad se lo creyó».

Kathleen miro a Charles fijamente. Luego habló con indiferencia.

-Charles, ni siquiera yo se lo que planea Samuel. Pero, al menos, con un trato asi, no intervendrá si un día decidimos irnos. De lo contrario, una vez que todo esté resuelto, ¿Crees en verdad que nos dejará ir?

Charles frunció los labios.

Aunque no tenia miedo de Samuel, Charles temia que Kathleen fuera la que pagara por ello si Samuel terminaba por atormentarlos.

Kathleen suspiro. No era una tonta.

-Deberias aprender a confiar más en mi.

A Charles le sorprendieron sus palabras

Entonces, Kathleen subió las escaleras.

Charles contempló su esbelta figura y luego dejó escapar un profundo y largo suspiro. «Quizá sea de verdad inteligente, pero no lo demuestra. Hay cosas que es mejor no saber. De lo contrario, no tendría ningún sentido

A la mañana siguiente, Kathleen estaba desayunando cuando Maria le trajo una invitacion.

-Sra. Johnson, esta es una invitación de la familia Morris

Kathleen se sorprendió, la familia Morris?»»

Tomó la invitación y la abrio. Mientras la hojeaba, Kathleen empezó a sonreir de oreja a oreja.

-¿Esto es de Christopher?

– No, Sra. Johnson. Es de Felix Morris -respondio Maria. Kathleen bajó de inmediato la invitación. Es el abuelo de Christopher.

-Por que te invita a ir? – pregunto Charles.

-Supongo que quiere preguntar sobre lo que pasa entre Christopher y yo. ¿Entiendes lo que quiero decir? No pasaba nada entre Christopher y yo, pero al final, la familia Morris malinterpretó la situación. Están armando un revuelo de la nada. -No había ninguna expresión legible en la cara limpia de Kathleen mientras hablaba.

Charles se volvió incómodo en un instante.

-Entonces, ¿deberíamos llamar a Christopher?

– Felix me pide que vaya por mi cuenta. Es obvio que quiere hablar conmigo a solas. Entonces, ¿de qué sirve llamar a Christopher? – Kathleen afirmó con frialdad.

-Entonces, ¿qué piensas decirles? -Charles tenía curiosidad.

-La verdad. – Kathleen no tenía ningún deseo de mentir a Felix.

Charles se detuvo un momento. Luego pregunto:

– ¿Debo acompañarte?

-No es necesario. No estaré mucho tiempo fuera-murmuro Kathleen.

Decidió explicarlo todo y luego volver directo a casa.

Sin embargo, Charles seguía preocupado por ella.

Cuando terminaron de desayunar, Kathleen recogió sus cosas y salió de la casa.

Condujo para reunirse con Felix ella sola.

Felix no residia con Christopher. En su lugar, Felix se quedó en la antigua mansión de los Morris.

Kathleen entró con su coche y se detuvo en el patio. Luego, se bajó apurada del coche.

Un hombre que parecia un mayordomo se acercó a ella.

–Sra. Johnson, por aqui a la casa, por favor

Kathleen asintió y siguió al mayordomo al interior de la mansión.

Cuando entraron en la mansion, el mayordomo la condujo al segundo piso, lo que la sorprendio.

-El segundo piso es donde el viejo Sr. Morris vive y recibe a los invitados. -El mayordomo enfatizó adrede su ultima palabra

A Kathleen no le importo que se refiriera a ella como invitada. Solo contesto:

-De acuerdo

Pronto llegaron al segundo piso, que si tenia una sala de estar.

-Sra. Johnson, por favor espere aqui un momento. El Sr. Morris vino a hacerle compañía al viejo Sr. Morris anoche. Por lo tanto, el viejo señor Morris se acostó bastante tarde. Iré a buscarlo ahora -dijo el mayordomo con calma

Kathleen asintio.

-Esta bien. No tengo prisa.

– Por favor, siéntase como en casa, señorita Johnson. -El mayordomo se dio la vuelta y se dirigió a la sala del interior de la mansión.

Kathleen permaneció de pie en el salón mientras examinaba su disposición.

El diseño de la sala de estar tenia un estilo más bien oriental. Además, habia numerosas estanterias. Parecía que la habitación era una amalgama de salón y estudio.

Por la disposición de la habitación era evidente que Felix llevaba una vida de silencio y tranquilidad.

De repente, se oyó un ruido procedente de una habitación cercana.

La puerta se abrió y Christopher salió de la habitación. Su ropa estaba desordenada.

Se quedó atónito en el momento en que puso los ojos en Kathleen.

€¿Por qué está ella aqui?>>

Kathleen, en cambio, no se sorprendió.

Despues de todo, el mayordomo mencionó que Christopher acompano a Felix hasta la noche. Es obvio que paso la noche aquin.

Justo cuando Kathleen pensaba para sí misma, una mujer salió de la misma habitación que Christopher. La mujer llevaba un vestido fino. Ella imploro:

-Christopher, no te vayas.

Comments

The readers' comments on the novel: Enamorándome de mi esposa provisoria